Ómnibus grande y viejo de color blanco con negro, transporte público que hace la ruta desde Puente Piedra hasta el Rímac.
Religiosamente todos los días tomo el micro a las 8am para ir al centro de Lima, va subiendo toda la gente que chambea. Casi todos los días sube la misma gente; el trayecto pir las mañanas es tranquilo y claro pues! si el micro va a paso de tortuga; whatever!!!!! Por la noche es otro cantar, de regreso el micro va medio repleto, felizmente que cuando subo encuentro asientos libres, si es posible me siento al lado de la ventana y me distraigo viendo la calle, muchas de las veces mi mente empieza a divagar...
En el trayecto sube cada personaje.... jóvenes vendiendo golosinas, cantantes (que a veces amenizan el camino), ex convictos que dan miedo y parecen que te van a robar, mujeres que piden plata para comprar medicinas para sus hijos enfermos, un sinfín de personajes que la verdad no me agradan nadita, pero bueno, así es el Perú criollo pero a pesar de todo amo a mi linda Lima.
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